Si me dijesen que son de otro planeta, tendría que creerlo. Es impresionante ver a estos ctenóforos flotar, moverse y su juego de luces más propio de una atracción de feria o Encuentros en la tercera fase.
Ni mil guinionistas de ciencia ficción inventaría un bicho tan extraño como éste.
Podría estar horas fotografiándolos y cada foto me parecería más bonita que la anterior.
Estar todo el domingo metido en casa después de la paliza de ayer no puede ser sano. Como uno de los motivos del proyecto 365 fotografías era forzarme a mover el culo más a menudo, me he metido en la ducha, me he vestido y he dado una vuelta por Valencia buscando la foto de hoy.
La ganadora ha sido: las Torres de Serranos.
Mis juguetes de la infancia. Parte 4. Los clicks de Famobil.
Famobil era la marca que los vendía en España hasta poco después de mi nacimiento, a partir de ahí se vendían bajo el nombre de Playmobil y era fácil nombrarlos indistintamente.
Había de todo, de construcción, de indios, medievales, de piratas… era difícil ver el barco pirata de Playmobil en un escaparate y no pegar la cara al cristal gritando que lo querías.